Ashtanga Yoga (Mysore)
Jueves, 12 diciembre •
13:00 - 15:00
Elena Calle
Elena es una profesora autorizada por el prestigioso Sharath Yoga Centre (anteriormente conocido como KPJAYI) en Mysore, India. Desde 2022, cuenta con la certificación para guiar a quienes deseen profundizar en esta práctica tradicional y transformadora.
Además de su dominio del Ashtanga Yoga, Elena posee una formación diversa en artes escénicas. Es graduada en la Escuela de Artes Escénicas de Sevilla, y ha alcanzado un nivel avanzado en Danza Contemporánea y Ballet Clásico con la Royal Academy of Dance.
¡Ven a conocerla y déjate inspirar por su energía y dedicación!
Descripción
Una clase de Ashtanga estilo Mysore es una experiencia única y personalizada. A diferencia de una clase tradicional guiada, en el estilo Mysore los estudiantes practican la serie de posturas de Ashtanga a su propio ritmo, siguiendo su respiración y capacidad física.
La clase comienza con los estudiantes entrando en la sala, donde practican en silencio. No hay instrucciones grupales continuas, sino que cada persona sigue una secuencia de posturas que ya ha aprendido, adaptada a su nivel. La maestra; Elena, está presente para ofrecer ajustes manuales, correcciones individualizadas y asistencia según las necesidades de cada alumno.
Los principiantes suelen empezar con una secuencia más corta y sencilla, mientras que los practicantes avanzados profundizan en las series más complejas. A medida que se progresa, el profesor introduce nuevas posturas de forma gradual, permitiendo que el estudiante interiorice cada una antes de continuar.
El ambiente en una clase Mysore es tranquilo y meditativo, con un fuerte énfasis en la conexión entre la respiración y el movimiento. Cada alumno está en su propio viaje, pero la energía compartida de la sala genera una atmósfera de concentración y esfuerzo colectivo.
Este formato permite que cada persona avance a su ritmo, desarrollando una práctica autónoma y profunda.
La clase comienza con los estudiantes entrando en la sala, donde practican en silencio. No hay instrucciones grupales continuas, sino que cada persona sigue una secuencia de posturas que ya ha aprendido, adaptada a su nivel. La maestra; Elena, está presente para ofrecer ajustes manuales, correcciones individualizadas y asistencia según las necesidades de cada alumno.
Los principiantes suelen empezar con una secuencia más corta y sencilla, mientras que los practicantes avanzados profundizan en las series más complejas. A medida que se progresa, el profesor introduce nuevas posturas de forma gradual, permitiendo que el estudiante interiorice cada una antes de continuar.
El ambiente en una clase Mysore es tranquilo y meditativo, con un fuerte énfasis en la conexión entre la respiración y el movimiento. Cada alumno está en su propio viaje, pero la energía compartida de la sala genera una atmósfera de concentración y esfuerzo colectivo.
Este formato permite que cada persona avance a su ritmo, desarrollando una práctica autónoma y profunda.